El escenario del partido fue el Lincoln Financial Field de Filadelfia, con una gran asistencia de espectadores. Los alemanes se presentaron como favoritos para llevarse la victoria, habiendo ganado previamente 3-1 contra el equipo de las Barras y las Estrellas en su gira por los Estados Unidos.

El partido en cuestión resultó en un enfrentamiento emocionante y equilibrado. Los autores de los goles fueron Uriel Antuna, quien anotó al minuto 37, y Érick Sánchez, que marcó al 47. Este enfrentamiento sirvió como una prueba importante para el Tri, que mostró una versión mejorada y más competitiva de su equipo.

Un aspecto sorprendente fue la inclusión de Santiago Giménez en la alineación titular. Los teutones tomaron la delantera en el minuto 24 con un gol de Antonio Rüdiger. A pesar de este revés, México no renunció y continuó buscando el empate con determinación, destacando las actuaciones de Uriel Antuna y Santiago Giménez en el frente de ataque.

El empate llegó al minuto 36, gracias a un centro de Hirving Lozano que encontró a Uriel Antuna dentro del área, quien definió con precisión para igualar el marcador. El primer tiempo dejó satisfechos a los aficionados, que anhelan partidos de alto nivel para una selección que será anfitriona en el Mundial de 2026.

El cuadro mexicano, en un recordatorio de lo ocurrido en Rusia 2018, tomó la delantera ante los alemanes al minuto 47, con un certero cabezazo de Erick Sánchez tras un excelente centro de Uriel Antuna. Sin embargo, la Mannschaft igualó rápidamente al minuto 51 con un gol de Niclas Füllkrug, luego de un impresionante esfuerzo individual de Sané.

A medida que el partido avanzaba, México ajustó su estrategia y midió sus capacidades frente a un equipo de clase mundial. La entrada de Henry Martín planteó una propuesta ofensiva por parte de Jaime Lozano, que buscaba aprovechar la ocasión para mostrar su valía en un enfrentamiento de alto nivel.

Este emocionante enfrentamiento entre México y Alemania no solo destaca la rivalidad deportiva entre ambas naciones, sino también la creciente calidad y competitividad del fútbol mexicano en el ámbito internacional. Los fanáticos esperan con entusiasmo futuros duelos entre estos equipos, que sin duda seguirán siendo apasionantes.

ero el gusto duró poco, pues la Mannschaft logró la igualada casi de inmediato y al 51 con una jugada individual magistral de Sané, que mandó un centro para Musiala, quien cabeceó un balón que fue atajado de manera increíble por Guillermo Ochoa, pero el esférico le cayó a Niclas Füllkrug para poner el 2-2.

Con el correr de los minutos, el cuadro azteca se fue ajustando y midiendo sus condiciones ante un rival de primer nivel, incluso el ingreso de Henry Martín puso la propuesta ofensiva en la mesa por parte de Jaime Lozano.