Volvería a robar animales, advierte a la Policía 

Nota Novedades News 

Dallas, Tx.- El hombre acusado de cometer una serie de delitos en el zoológico de Dallas, desde recintos cortados hasta animales robados, ha sido acusado de un par de cargos por delitos graves.

Un gran jurado del condado de Dallas entregó las acusaciones ayer martes por la mañana contra Davion Dwight Irvin, de 24 años, por dos cargos de robo.

El primer gran incidente en el zoológico, el 13 de enero, fue la desaparición de la pantera nebulosa llamada Nova, quien fue encontrada ilesa horas después. La Policía dijo que su hábitat había sido cortado intencionalmente. Los funcionarios del zoológico descubrieron más tarde recintos desgarrados de los monos langur, que todavía estaban en su hábitat, y la muerte inusual de un buitre orejudo llamado Pin se produjo una semana después.

Nueve días después de la muerte de Pin, dos monos tití emperador, Bella y Finn, fueron robados de los terrenos del zoológico. Más tarde fueron encontrados vivos en una casa vacía en Lancaster y, después de varias semanas en cuarentena, regresaron a su hábitat.

Irvin fue arrestado el 2 de febrero, después de que lo vieron en el Acuario Mundial de Dallas, por cargos de robo y crueldad animal en los incidentes que involucraron a la pantera nebulosa y los monos robados. Una portavoz de la Policía dijo que Irvin también está relacionado con el recinto cortado de los monos langur, pero no se le ha relacionado con la muerte de Pin.

MISTERIOSO 

LADRON 

La Policía escribió en una declaración jurada de orden de arresto que un hombre, luego identificado como Irvin, había estado haciendo preguntas «oscuras» a los empleados del zoológico en los días previos a la captura de los monos. En la declaración jurada, la Policía alega que Irvin les dijo a los investigadores que ama a los animales y que, si lo liberan de la cárcel, regresaría al zoológico y volvería a robar.

Las acusaciones por delitos graves contra Irvin dicen que irrumpió en el zoológico con la intención de cometer un robo (Nova) y volvió a entrar más tarde y cometió un robo (Bella y Finn). Los seis cargos por delitos menores de crueldad animal que enfrenta están relacionados con los monos robados, tres por cada animal, por confinarlos en un lugar inadecuado, no proporcionarles comida ni agua y abandonarlos.

Irvin permaneció bajo custodia ayer martes en la cárcel del condado de Dallas, con una fianza fijada en $130,000; las condiciones de su fianza dicen que si es liberado no podrá visitar a ningún zoológico, acuario o tienda de mascotas. Su abogado no respondió a las solicitudes de comentarios.

RESUELTO 

EL MISTERIO 

El culpable vino y se fue en la oscuridad de la noche, sin dejar rastro ni huella ni película. La única evidencia de un visitante no deseado tomó forma en una malla cortada y destrozada, y el descubrimiento de un solo inquilino en una casa donde habían vivido dos.

Era temprano en la mañana de la segunda semana de enero, viernes 13, cuando el zoológico de Dallas informó que Nova, una pantera nebulosa de 4 años, no se encontraba durante lo que debería haber sido un conteo matutino de rutina. La palabra “leopardo” provocó tal horror cuando llegó a través del teléfono, el Departamento de Policía desplegó no solo drones infrarrojos, un helicóptero, detectives y patrullas, sino quizás su mejor línea de defensa: SWAT.

Lisa Van Slett estaba en casa cuando su teléfono se iluminó con la notificación de emergencia, y la líder veterana del equipo de animales del zoológico estaba tan segura de que había habido un error que se quedó atrás. Los leopardos nublados son tan sigilosos como inteligentes, se dijo a sí misma. Nova solo se estaba escondiendo, y solo pasaría un minuto antes de que la encontraran.

Un minuto se convirtió en media hora, y la esperanza pasiva se convirtió en urgencia. Van Slett llegó no muy lejos detrás de la caballería.

Parecía una oficial táctica de arriba abajo. “Es un arma realmente grande para un gato realmente pequeño”.

“Lo sé, lo sé, ha habido una falta de comunicación”, respondió el oficial, con un rifle atado a su pecho. “Solo estamos aquí para ayudarlo a buscar”.

CODIGOS 

DE ALARMA 

Hay dos alarmas que puedes hacer sonar en un momento como este: Código Azul o Código Rojo, esta última reservada para los animales más peligrosos. Nova cayó en el primero.

Los nombres pueden ser engañosos.

Con aproximadamente 29 libras y 3 pies de largo, Nova no es un leopardo en absoluto, sino un género completamente separado de gato salvaje llamado así por las manchas en forma de nube que cubren su cuerpo. Cuando se compara con la personalidad juguetona de su hermana, Luna, se sabe que Nova es tímida, incluso distante. Sus cuidadores la llaman cariñosamente «Nova Bean», una oda a las almohadillas de forma ovalada que amortiguan sus patas.

Siempre en pareja, Nova y Luna fueron llevadas al zoológico de Dallas en 2021 a través de Houston, como parte de un elaborado plan de supervivencia para sostener a la población en declive.

Ahora uno de ellos se había ido. ¿Se la llevaron? se preguntó Van Slett. ¿Ella está aqui? ¿Está segura?

El campus de 106 acres que había conocido durante 19 años nunca se sintió tan grande.

DOLOROSA 

VERGUENZA 

El zoológico que amaba estaba a punto de convertirse en una curiosidad internacional y en una dolorosa vergüenza para la ciudad. Los desconcertantes descubrimientos que seguirían durante las próximas tres semanas, que escalarían a animales muertos y robados, mantendrían a Van Slett y al resto del personal despierto por la noche, luchando con insinuaciones hirientes de un «trabajo interno». Se acusaría al liderazgo de perder el control. La verdad era mucho más complicada. Incluso después de un arresto, el misterio persistiría, exponiendo mucho sobre lo que valoramos y en quién confiamos.

Los zoológicos, que están cuidadosamente diseñados para parecer abiertos y salvajes, funcionan con protocolos, procedimientos y planes de seguridad. Un leopardo nublado estaba suelto, pero ¿quién estaba realmente en peligro? Aquellos que trabajan allí han llegado a saber que el animal menos predecible y más peligroso puede ser el humano que entra por la puerta principal.

‘La naturaleza nos lo va a decir’ 

Van Slett se reunió con un grupo de oficiales para un seminario improvisado en Primate Place, donde las panteras nebulosas vivían entre los gibones de mejillas blancas y los monos colobos. Primero, le mostró a Luna al equipo de búsqueda, para que pudieran visualizar exactamente lo que estaban buscando.

El resto de la lección se reducía a esto: Presta atención a la naturaleza.

“La naturaleza nos lo dirá”, les dijo Van Slett. “Si ves un árbol lleno de pájaros, Nova no está allí. Sigue moviéndose.»

La teoría era que Nova, que ha estado unida a su hermana desde que nació, no se iría muy lejos. Una gata nocturna, la esperanza era que estuviera camuflada en un dosel cercano, esperando la cena o el anochecer para explorar.

Luego de varias horas de incesante búsqueda infructuosa, el incesante chillido de una ardilla hizo que Van Slett se detuviera. Presta atención a la naturaleza.

Siguió el sonido a lo largo de un camino pavimentado hasta que llegó a una puerta a unos 100 metros del hábitat. Detrás de esa puerta hay un vestíbulo, y allí vio a Nova, quien, como si supiera que esta era su llamada a escena, dio una vuelta.

Van Slett tomó su radio. «Tengo ojos en Nova», dijo, con tanta emoción que se olvidó de decir su nombre.

«Lisa, soy Lisa».

Una conferencia de prensa pronto revelaría lo que los que estaban dentro sabían desde el principio: lo que le sucedió al recinto de Nova no fue un accidente, ni le sucedió solo a su recinto.

Ese mismo día, se encontró un corte similar en la malla que rodeaba a los monos langur, aunque ninguno de ellos escapó. Se inició una investigación criminal, Nova obtuvo el visto bueno de un veterinario en el lugar y el zoológico esperaba que lo peor ya hubiera pasado.

ARRESTAN 

A CRIMINAL 

El 2 de febrero, un hombre que vestía el mismo estilo y color de ropa que la persona en una foto que la Policía había publicado a principios de semana entró al Dallas World Aquarium en el centro. Detuvo a un empleado para hacerle preguntas sobre uno de sus animales, y el empleado lo reconoció de inmediato por la cobertura noticiosa de los monos robados.

Davion Irvin, de 24 años, fue arrestado más tarde esa noche.

Irvin era un hombre casi invisible, un millennial límite que casi no tenía huella digital hasta el día en que la Policía publicó esa captura de pantalla de una cámara de seguridad del Zoológico de Dallas. La mañana después de su arresto, un hombre que se identificó como amigo de la familia de Irvin le dijo a The News por mensaje de texto que la Policía se había equivocado de persona. Irvin fue visto sosteniendo una bolsa de papas fritas, después de todo, «no hay monos».

Irvin era un buen chico, dijo, que nunca se había metido en problemas, y una búsqueda en los registros judiciales del condado de Dallas mostró que el único encuentro documentado de Irvin con la Policía fue desestimado. La orden alegó en julio de 2020 que Irvin dio cuatro nombres falsos a un oficial que lo interrogó sobre el robo de Powerade y agua de un Dollar General.

Mientras el amigo de la familia profesaba la inocencia de Irvin, la Policía informó que Irvin estaba confesando.

SUCEDIÓ 

ASI 

Según una declaración jurada de orden de arresto, Irvin declaró a la Policía que sucedió así: mucho después de que el zoológico de Dallas cerrara a las 4 pm el 29 de enero, esperó hasta que oscureció, saltó una cerca y se dirigió a la exhibición de monos. Allí cortó la malla metálica, atravesó la puerta, cortó la jaula y se llevó a Bella y Finn.

Después de atrapar a los monos, los llevó a dar un paseo en el tren DART antes de caminar hacia la casa vacía de Lancaster donde tenía a sus animales. Las imágenes de seguridad de DART muestran a un hombre que se cree que es Irvin saliendo del tren con una mochila.

Irvin fue fichado por seis cargos de crueldad animal y un cargo de robo en relación con los monos tití emperador, además de otro cargo de robo relacionado con Nova, la pantera nebulosa. También está relacionado con el recinto cortado de los monos langur, dijo una portavoz de la Policía, pero la muerte de Pin es un misterio no relacionado.

Hasta ahora, la única explicación que ha ofrecido Irvin es que es un hombre que ama a los animales.

Irvin le advirtió a la Policía que si salía de la cárcel, lo volvería a hacer.