Regresando de México y pensando ya en navidad fui a la tienda. Ya en Walmart me encontré con un amigo y su familia. Andaba comprando los regalos para sus hijos… ellos le decían que querían para navidad.
¿Les compras lo que quieren o lo que necesitan?
Lo que ellos quieran- fue la respuesta
¿Lo que cueste? volví a preguntar.
Claro, para eso tienen a su papá- me respondió.
No me sorprendió la respuesta. Sabía que mi amigo por sus hijos es capaz de todo… pero no sabía a qué grado. Se la pasa trabajando todo el año para darle el gusto a sus hijos… bueno, a lo mejor usted piensa igual.
Hace unos meses se me ocurrió invitar a cenar a mis hijos. Unos querían ir a un lado y otros… a otro lugar. Me encontré en un pequeño problema… a quien darle el gusto. A quien le hiciera caso iba a quedar mal con el otro. Una de mis hijas al ver en el problema que me había metido se me quedó viendo y me dice…
¿Te puedo hacer una pregunta?
Claro que si- fue la respuesta.
¿Desde cuándo nos preguntas a donde queremos ir a comer?  No te metas en problema. Llévanos a donde tú quieras y se acabó el problema. El que quiera comer que coma y el que no… pues simplemente que no coma.
Salomónico comentario había hecho mi hija. Le di las gracias y tomé la decisión de ir a comer… a un lugar. Desde entonces no tengo problemas para hacer la decisión de ir a comer o cenar a tal lugar. Y nadie se queda en casa. ¿Desde cuándo los hijos nos dicen qué es lo que debemos de comprarles? ¿Desde cuándo ellos tomaron el mando de la casa?
Soy fan de Mafalda y me hizo recordar a Guille…el hermanito de Mafalda. Guille le da un papel y un lápiz a su papá.
¿Y esto para qué es? pregunta el papá.
Para que le escribas mi carta a los Reyes Magos-
Bien, que quieres que le ponga-
Queridos Reyes magos…
El papá escribe “Queridos Reyes Magos”…
¿Qué les vas a pedir?
Todo-
Ellos no te pueden traer todos los regalos- le dice su papá
Entonces borra “queridos”-
¿Qué es lo que le hemos enseñado a nuestros hijos? En la televisión todo el año los están bombardeando con anuncios comerciales de juguetes.
Los de la televisión saben muy bien por donde llegarle a los padres… por los hijos. Saben que una vez llegando a sus hijos ya nos amolaron.
Si no tienes este juguete no estas a la moda… dicen. Y como nuestros hijos quieren estar a la moda… pues ya nos fregaron. Al menos en mi infancia veía como mis amigos del barrio tenían muchos juguetes y nosotros como éramos pobres… pues con cualquier cosa nos conformábamos. Y nunca nos vimos menos que ellos. Cuando mucho dos semanas y ya se olvidaban del juguete costoso que les habían dado. ¿La razón? Que no necesitaban ese juguete. Cada vez se hace más difícil complacer a nuestros hijos… y si no les compramos lo que ellos quieren nos hacen un show en las tiendas. Lloran gritan, se tiran al piso, patalean… y al final se les viene comprando lo que se les antojó.
Van a convencer al padre que les compre lo que ellos le están pidiendo…  perdón, exigiendo. ¿Para qué esperar que le haga ese papelito en la tienda?
Ellos saben muy bien que después de su “actuación” el padre le va a complacer con lo que le está exigiendo que le compre. Gracias a Dios que me dio un padre que con una mirada nos decía lo que tenía que decirnos… y nosotros bien tranquilos. Gracias a Dios que mis hijos crecieron con esa idea también. Nunca de los nunca me hicieron una “actuación especial”.
Recuerdo que mi hijo cuando era pequeño lo llevaba a la tienda tomaba algo y me decía… ¿mañana me puedes comprar?
Claro que si hijo- al día siguiente ya se le olvidaba mi promesa.
Con tristeza veo cómo los padres son manejados por sus hijos y les compran no se si para presumir o para tener contentos a sus hijos.
Ha llegado el mes en donde ir a cualquier tienda es un suplicio. Hay que tener mucha paciencia para ir de compras… no se diga si va a comprar los regalos.  Por eso digo que los hijos y los anuncios de la televisión tienen la última palabra. Y nosotros… ¿qué?  NOTA: Mi estimado lector… he cambiado mi correo electrónico
Sugerencias, comentarios y opiniones favor de hacerlos llegar a:
egammaliel9.10@gmail.com