La temporada de Chicago Bulls venía siendo una de las más sorpresivas de toda la National Basketball Association (NBA) 2021 gracias a una agencia libre y temporada baja donde tocaron las piezas necesarias y conformaron un equipo muy peligroso y que se lo considera contendiente.

Casa de Michael Jordan, estas expectativas conllevan una gran presión para sus jugadores, que hasta el momento han respondido. Antes de que sufrieran un gran golpe por el COVID-19 que llevó a tener 10 jugadores en fuera de la plantilla por culpa del virus, este equipo venía en racha.

Y mucho de esa racha tenía que ver con un ataque liderado por los dinámicos anotadores Zach LaVine y DeMar DeRozan, y una defensa con un dúo de exjugadores de Los Angeles Lakers a la cabeza: el base suplente Alex Caruso, y el titular Lonzo Ball.

Ball tiene una gran campaña en donde promedia 12.8 puntos, 5.5 rebotes, 4.9 asistencias, 1.7 robos y 1 tapón por juego en 35 minutos por noche. Lo que está haciendo y que viene pasando por debajo del radar, tiene que ver con su promedio de tapas.
Con una tapa por partido, Lonzo está promediando la mayor cantidad de tapones para un base en la historia de la NBA. Claro que falta, pero de terminar así o mejor, superaría a grandes defensores modernos como Ben Simmons y John Wall que lograron llegar a 0.9.