CLAVE: LLAMADO
Y… ¿desde cuándo sientes ese llamado de irte de misionera?
Te pregunto porque muchas personas creen que el hecho de irse lejos de la
familia es suficiente para huir de los problemas cotidianos.
Algunas de las características de los misioneros es que están conscientes
de que no van a pasarla bien… sino que lo más seguro es que van a tener
una vida llena de carencias. Pero, puede más el amor por la gente que el
amor propio.
Una persona que está dispuesta a ir a ver en qué puede ayudar a sus
semejantes es digna de mis respetos, porque sabe que no tendrá televisión,
comidas en los mejores restaurantes, zapatos de marca, vestidos sí es que
los ven, nada de maquillaje… y tú no estas acostumbrada a vivir así.
¿Te imaginas vivir sin aire acondicionado, sin calefacción… Y tú tan
escandalosa que eres, que no quieres que te de el sol… ni que te despeine
el aire.
¿Te imaginas andar casi todo el día descalza? Qué pie de atleta ni que
nada.
¿Dormir? quién sabe a qué horas y despertar a la hora que te digan…
¿El baño? Nada de acondicionador, ni de shampoo. Si acaso te peines será
de vez en cuando si es que te va bien.
En cuanto a ir de compras es otro problema; no estas acostumbrada…
nada de nada. No podrás hacerlo… si acaso ir de cacería de mandriles o
lagartos.
Ahora, tú mamá me dijo que te gusta mucho el chisme. ¿Te imaginas que
pase un día sin chismear? En lo particular no creo que aguantes.
¿Y las taranovelas? ¿Te imaginas lo que tienes que hacer en las aldeas en
vez de estar viendo tus novelas?
¿Crees que porque eres del partido Morena y dices que llevas una vida de
austeridad Franciscana ya la puedes hacer? No hija, no es lo mismo.
¿Te has puesto a pensar el giro que va a dar tu vida si es que te vas de
misionera y todo porque ya no quieres aguantar a tu esposo?… ya lo dijo
Juan Gabriel (QEPD) no vale la pena.
CLAVE: DIETA
Para empezar, no soy experto en dieta ni nada por el estilo. Es más: ni por
equivocación ni por no dejar.
Los consejos que te voy a dar no los tomé de ninguna conferencias ni
curso tomado por mí. Los consejos de mis conferencias son otro rollo.
Mas que nada son experiencias que la madre naturaleza me ha dado a
porrazos y que las he tenido que ir metabolizando conforme mi intelecto
me ha dado oportunidad… (sabes que es metabolismo ¿no? ni modo, ya te
fregaste)
Ninguna dieta es buena… así es, así como lo estas leyendo. Ninguna dieta
es buena cuando no se respeta y se hace lo que te de tu regalada gana.
Por muy rica o sabrosa que sea la dieta si a ti no te gusta y no la sigues
como debe de ser… de nada vale.
Ninguna dieta es mala… (así como lo estas leyendo). Ninguna dieta es
mala… si es que la llevas como debe de ser.
Lo que te quiero decir es que muchas veces nos cuidamos de no engordar,
pero por otra parte llevamos una vida llena de amargura porque no
comemos lo que nos gusta y podemos disfrutar, sino que el momento de
disfrutar se convierte en disgusto.
Para empezar, tienes que saber el por qué quieres una dieta… si es por
salud o porque quieres bajar de peso.
Una vez que empieces una dieta lo más seguro es que te estas amarrando
por toda tu vida, además estamos en junio, mejor déjalo para el otro año.
Muchas veces nos cuidamos de una cosa y descuidamos otras más
importantes… y lo peor es que morimos sin poder disfrutar lo que tanto
nos gusta.
El problema de muchas personas es que no sabemos de limitaciones.
Comemos hasta hartarnos. Dicho de otra manera… exageramos a mas no
poder. Comemos como si pareciera que se va a acabar la comida.
Recuerda que hay un dicho… “De limpios y tragones…”
Como dijo mi abuelita… tu di que sí, aunque te llenes de hijos.
¿Sabes que es lo peor? Es que no mueres por lo que te estas cuidando, sino
por lo menos esperado.
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