Presidenta Sheinbaum responde amenazas que dijo Trump que dijo en Michigan

Trump, en un evento realizado en Michigan, anunció su intención de «notificar formalmente» a México y Canadá sobre la posibilidad de invocar las disposiciones de renegociación del T-MEC, que fue negociado bajo su administración y entró en vigor en 2020. Esta declaración ha generado preocupación en diversas esferas, especialmente en el contexto electoral actual en Estados Unidos. Sheinbaum, al respecto, se mostró confiada en que, independientemente de las estridencias propias de las campañas políticas, tanto Estados Unidos como México comprenden la necesidad de mantener el acuerdo. «Nos vamos a poner de acuerdo. Están en campaña, y hay mayores estridencias en uno u otro sentido, pero ellos saben y nosotros sabemos que es indispensable el acuerdo, en el marco de nuestra soberanía», afirmó la presidenta mexicana.
Sheinbaum subrayó que México es un proveedor clave para la economía estadounidense, destacando que las exportaciones hacia Estados Unidos han alcanzado un «máximo histórico». Esta relación comercial es un pilar para la economía mexicana, y su importancia no debe subestimarse. «Somos el principal exportador a Estados Unidos y tenemos una relación muy importante entre nuestras economías», añadió, subrayando el impacto positivo que esta interdependencia tiene para ambos países.
Además, la mandataria mexicana amplió su visión hacia una integración económica más robusta no solo con Estados Unidos, sino también con Centroamérica y Sudamérica. Este enfoque refleja una estrategia más amplia para fortalecer la economía del continente en su conjunto, generando oportunidades comerciales y colaboración entre naciones. «Esto avanza hacia una fortaleza mayor de todo el continente», explicó, sugiriendo que el T-MEC es solo un componente de un proyecto más ambicioso.
Durante su intervención, Sheinbaum también abordó las preocupaciones planteadas por Trump respecto a los productos provenientes de China que no están adecuadamente reportados. En este sentido, la presidenta mencionó que el T-MEC ya incluye limitaciones sobre este tipo de productos, lo que demuestra que el tratado está diseñado para adaptarse a las realidades cambiantes del comercio global. Esto resalta la capacidad del T-MEC para abordar desafíos contemporáneos y asegurar prácticas comerciales justas.
Ante la inminente elección presidencial en Estados Unidos, Sheinbaum reafirmó su disposición para alcanzar acuerdos con el ganador, ya sea Trump o la actual vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris. «Gane quien gane, sea el presidente Trump o la vicepresidenta Kamala, nosotros nos vamos a poner de acuerdo. Nuestras economías tienen mucha integración», concluyó, enfatizando la importancia de mantener diálogos constructivos independientemente de las diferencias políticas.
Esta declaración se produce en un contexto de creciente incertidumbre sobre la política comercial y económica entre México y Estados Unidos. Las tensiones políticas en ambos países han llevado a cuestionamientos sobre el futuro del T-MEC y su capacidad para adaptarse a los cambios. A medida que se acercan las elecciones, el tema de la migración, la economía y las relaciones internacionales se convierte en un punto central en la agenda política, no solo en EE.UU., sino también en México.
El T-MEC ha sido un tema crucial desde su firma, y su impacto ha sido objeto de debate constante. La retórica de Trump y otros líderes políticos ha contribuido a la polarización en torno a este acuerdo. Sin embargo, Sheinbaum se esfuerza por tranquilizar a la población y asegurar que la cooperación económica es un camino que ambas naciones deben seguir, más allá de las diferencias ideológicas.
La importancia del T-MEC para la economía mexicana y estadounidense es indiscutible. No solo establece un marco para el comercio, sino que también proporciona estabilidad en un clima global incierto. El futuro del acuerdo dependerá de la voluntad política de ambas partes para trabajar juntas, independientemente de quién asuma el liderazgo en la Casa Blanca. Las palabras de Sheinbaum reflejan una visión pragmática y una esperanza de que, a pesar de los desafíos, la colaboración puede prevalecer en el ámbito económico.
Sheinbaum prevé anuncios de nuevas inversiones de EE.UU. tras reunión de empresarios
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, adelantó que habrá anuncios de nuevas inversiones durante el encuentro de alto nivel de empresarios mexicanos y estadounidenses que encabezará este martes, el ‘US-Mexico CEO Dialogue‘.
La mandataria aseguró en el Palacio Nacional que en la reunión destacará “el interés que hay de inversionistas, particularmente de Estados Unidos en México, y también va a haber una conferencia de prensa después, donde entre otros (temas), se van a anunciar algunas inversiones que ya están planteadas”.
“¿De qué se trata este encuentro? En su momento, empresarios nacionales y, principalmente, de Estados Unidos plantearon la posibilidad de que tuviéramos un diálogo para conocer cuáles son los beneficios y los incentivos que se van a generar para la inversión en México”, detalló.
Este será el primer gran encuentro de Sheinbaum Pardo con directivos de Estados Unidos desde que asumió la presidencia el 1 de octubre en medio de la incertidumbre que han causado reformas como la que instaura elecciones populares del Poder Judicial y la que elimina reguladores autónomos de energía, economía y telecomunicaciones.
Aún así, la presidenta Sheinbaum Pardo descartó que haya “cautela” entre inversionistas.
“Tengo conocimiento, a través del secretario de Economía (Marcelo Ebrard) y, de manera directa, de muchísimas empresas que quieren seguir invirtiendo en nuestro país, México tuvo récord de exportaciones, es el principal socio comercial de Estados Unidos y esto va a seguir en nuestro país”, aseguró.
Sheinbaum resaltó la oportunidad que tiene el país ante el fenómeno de la relocalización de empresas o ‘nearshoring’ y el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Pero pidió que el éxito “no solo se mida” en inversión extranjera directa, con un récord de 31.000 millones de dólares en el primer semestre del año, sino también con indicadores de bienestar, como salarios, respeto a los derechos laborales y protección del medioambiente.
Por ello, resaltó la creación de “polos de bienestar” para buscar que la inversión se acerque a las regiones donde haya disponibilidad de energía y capital humano.
“El tratado comercial con Estados Unidos y Canadá abre esta posibilidad de lo que se llama hoy la relocalización de las empresas, muchas empresas estadounidenses que encuentran en México una oportunidad para invertir”, comentó.
Cabe mencionar sobre el T-MEC.. El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) es un acuerdo comercial que tiene como objetivo fortalecer la relación económica entre los tres países. Este tratado, que reemplazó al anterior Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), fue firmado en noviembre de 2018 y entró en vigor el 1 de julio de 2020. Desde su implementación, ha sido un tema crucial de discusión en el ámbito político y económico, especialmente en el contexto de las relaciones trilaterales y el comercio internacional.
Uno de los objetivos principales del T-MEC es facilitar el comercio y la inversión entre México, Estados Unidos y Canadá. Para lograr esto, el acuerdo establece normas que buscan eliminar barreras comerciales, aumentar la transparencia y promover prácticas comerciales justas. Se espera que, al facilitar el comercio, se generen más empleos y se estimule el crecimiento económico en los tres países.
Una de las características más destacadas del T-MEC es la inclusión de disposiciones relacionadas con la economía digital. Reconociendo la creciente importancia del comercio electrónico, el acuerdo establece reglas para facilitar las transacciones digitales y proteger los datos de los consumidores. Esto no solo moderniza el marco comercial, sino que también refleja la realidad del comercio en el siglo XXI, donde las tecnologías digitales son fundamentales.
El T-MEC también aborda temas laborales y ambientales, exigiendo que los países signatarios implementen estándares laborales y protecciones ambientales más estrictas. Estas disposiciones buscan garantizar que el comercio no solo sea beneficioso desde el punto de vista económico, sino que también respete los derechos de los trabajadores y contribuya a la sostenibilidad del medio ambiente. Al incorporar estas cláusulas, el T-MEC se esfuerza por equilibrar el crecimiento económico con la responsabilidad social y ambiental.
Otro aspecto importante del T-MEC es su impacto en el sector automotriz, que es uno de los más relevantes en las economías de México y Estados Unidos. El acuerdo establece requisitos más estrictos para la producción de vehículos, lo que implica que una mayor proporción de las piezas y componentes utilizados en la fabricación de automóviles deben ser producidos en América del Norte. Esto tiene el potencial de aumentar la inversión en la industria automotriz de la región y generar empleos.
Sin embargo, el T-MEC también ha sido objeto de críticas. Algunos sectores argumentan que el acuerdo no aborda de manera suficiente cuestiones relacionadas con la desigualdad económica y que podría favorecer a las grandes corporaciones en detrimento de los trabajadores. A pesar de estas críticas, muchos expertos coinciden en que el T-MEC es un paso adelante en la integración económica de América del Norte y que ofrece un marco más moderno y equitativo que su predecesor.
La política comercial es un tema candente en la agenda pública, especialmente en el contexto de la política estadounidense. La retórica polarizada en torno al comercio ha llevado a cuestionamientos sobre la efectividad del T-MEC y su capacidad para adaptarse a las realidades económicas cambiantes. Las amenazas de renegociación por parte de líderes políticos, como Donald Trump, han añadido incertidumbre a la estabilidad del tratado.
Pese a estos desafíos, el T-MEC continúa siendo fundamental para las economías de México, Estados Unidos y Canadá. El acuerdo no solo tiene implicaciones económicas, sino que también está vinculado a temas de seguridad y cooperación en la región. A medida que los tres países navegan por un entorno global incierto, la necesidad de colaboración y diálogo se vuelve aún más apremiante.
El futuro del T-MEC dependerá de la voluntad política de los líderes de cada país para trabajar juntos en beneficio mutuo. La experiencia ha demostrado que la cooperación en el ámbito comercial es esencial para enfrentar los desafíos globales. Por ello, es crucial que los países firmantes del T-MEC reconozcan su interdependencia y se comprometan a fortalecer sus lazos económicos, independientemente de las diferencias ideológicas.
el T-MEC representa una oportunidad para redefinir la relación económica entre México, Estados Unidos y Canadá. Su éxito dependerá de la capacidad de los líderes políticos para priorizar la cooperación y el beneficio mutuo sobre la retórica polarizadora. Al hacerlo, no solo se puede lograr un crecimiento económico sostenible, sino también un futuro más próspero para todos los involucrados en esta importante alianza comercial.
novedadesnews7196 Posts
0 Comments