El encuentro entre los New Orleans Saints y los Dallas Cowboys terminó con una contundente victoria de 44-19 a favor de los Saints, gracias a una actuación estelar de Alvin Kamara, quien anotó cuatro touchdowns, incluyendo una jugada destacada de 57 yardas en un pase pantalla. Kamara demostró una vez más ser una pieza fundamental en la ofensiva de Nueva Orleans, rompiendo la defensa de Dallas con su velocidad y capacidad para generar jugadas explosivas. Esta victoria no solo representó un golpe a los Cowboys, sino que también puso fin a su racha de 16 victorias consecutivas como locales en temporada regular.
Derek Carr, el mariscal de campo de los Saints, tuvo un sólido desempeño, lanzando para 243 yardas y consiguiendo dos pases de anotación, además de sumar un touchdown en un acarreo personal de una yarda. La ofensiva de Nueva Orleans mantuvo su ritmo demoledor, anotando en sus primeras seis series ofensivas, lo que les permitió tomar control del partido desde el inicio. Esta eficiencia ofensiva recordó el gran arranque de temporada de los Saints la semana anterior, cuando lograron anotaciones en nueve series consecutivas en su aplastante victoria sobre Carolina. Por otro lado, los Cowboys no lograron mantener el nivel defensivo que los había caracterizado la semana anterior, cuando limitaron a Cleveland a tan solo 54 yardas antes del medio tiempo. En este partido, la defensa de Dallas fue sorprendida en dos ocasiones con pases largos: uno de 70 yardas a Rashid Shaheed y el pase pantalla de 57 yardas a Kamara. Estos errores defensivos permitieron a los Saints establecer una ventaja cómoda antes del descanso, complicando el panorama para Dallas.